Ubicado en la costa de Vicente López, frente al Río de la Plata, este edificio aprovecha su privilegiada orientación hacia el río y el parque costero a través de un diseño aterrazado que maximiza las vistas y genera jardines privados. La fachada vidriada establece una conexión visual constante con el entorno fluvial y el parque, mientras que los parasoles de hormigón en tres de sus caras cumplen una doble función: controlar el clima interior y proveer privacidad a los ocupantes. Este conjunto de estrategias arquitectónicas integradas busca sacar el máximo partido de las condiciones del emplazamiento frente al Río de la Plata y el parque costero, brindando a los residentes el disfrute de las vistas y terrazas, sin descuidar el confort climático y la privacidad interior.