La intención del edificio es proporcionar identidad espacial a los conceptos de Justicia, como Equidad y Transparencia, buscando acortar la distancia cultural entre el Poder Judicial y la Sociedad. Para ello, se adopta una forma circular icónica, evitando vértices y jerarquías espaciales, aunque también puede concebirse como una tira plegada en círculo. Esta configuración anular crea un patio central que, dada la pendiente del terreno, permite que el espacio fluya por debajo, conectando el entorno y atrayendo a la gente hacia su interior. La sostenibilidad y el control energético fueron objetivos prioritarios en el diseño de las fachadas, tanto interior como exterior, de este proyecto que busca materializar los principios de la Justicia a través de su propia concepción espacial.